Una de mis primeras entradas en el blog tenía que ser para referirme a dos de los bares madrileños más concurridos y con más historia de Madrid y que parte de ellos da nombre a mi blog: Los calamares.
¿Qué puede haber más típico que acercarnos a comer un bocadillo de calamares a los alrededores de la Plaza Mayor? Es cierto que en la misma plaza hay numerosos bares que nos ofrecen esta opción y desde sus puertas ya podemos oler la fritanga, pero además de estar rodeados de guiris allí pagaremos bastante más.
Dos de los bares más tradicionales los encontramos en la Calle Botoneras. Nada más entrar en la calle desde la plaza, se hallan La Ideal y La campana, dos bares con mucha solera.
En el escaparate de La Ideal podemos disfrutar de como rebozan y fríen los calamares a una velocidad pasmosa, sin duda la escena atraerá nuestro interés. Éste es un poco más pequeño, ya que La Campana amplió negocio y ahora es algo más grande.
A pesar de sentirnos un poco agobiados por lo estrecho y alargado del local y lo concurrido que está, si conseguimos hacernos con una mesa, podremos disfrutar de unos buenos bocadillos al precio de 3´5€. Los bocadillos destacan más por su tamaño que por su calidad, ya que los calamares no son nada del otro mundo y en muchos bares de barrio de la capital podremos probarlos mejores. Pero merece la pena acercarse una vez al año a alguno de estos dos bares, ayudar a mantener el negocio tradicional y formar parte de una de las mayores atracciones turísticas de Madrid. Si no te has acercado nunca por la Calle Botoneras te animo a ello y a probar cualquiera de los dos, espero tus comentarios!!
Me quedo con los de la ideal, sin duda.
ResponderEliminar!Al fondo hay sitio!